Este año ha estado lleno de grandes retos, pero también de mucha diversión; y entre todos esos momentos, nuestro aniversario ocupa un lugar especial.
Cumplir un año más es un gran logro y un recordatorio de los obstáculos que hemos superado. Queremos dedicarlo al motor de Chat2Desk: nuestro equipo. Ustedes demuestran día a día que esta carrera es colectiva, que cada talento suma y que su habilidad marca la diferencia en cada proyecto.
Nuestra jornada comenzó rumbo a Tepotzotlán. Entre risas y charlas durante el viaje, llegamos a Abekany, un lugar que nos abrió las puertas a una experiencia sensorial completa. Tras recargar energías con el desayuno, nos adentramos en una charla transformadora: aprendimos que la mente es poderosa y que el discurso que nos contamos a nosotros mismos define nuestra realidad.
Comprendimos que la energía que proyectamos es vital para el éxito y que el esfuerzo dedicado es la llave de nuestras metas. A través de una sesión de hipnosis grupal, logramos conectar con nuestras emociones, dejando atrás miedos y obstáculos para liberar nuestra mejor versión.
Fue una jornada de contrastes: entre momentos de profunda introspección, gritos de liberación y abrazos sinceros, pasamos a la acción. Nos dividimos en equipos para enfrentar retos de canto y estrategia donde la diversión fue protagonista.
Hubo penitencias, competencia sana y desafíos mentales que solo pudimos superar trabajando unidos.
Después, pusimos a prueba nuestra fortaleza física y mental en los puentes colgantes, una actividad que nos recordó que, juntos, no hay obstáculo que no podamos cruzar. Tuvimos un momento de descanso y comida para tomar fuerzas antes de la última actividad: el gotcha. Fue un momento de competitividad que dio paso a la reflexión final sobre cómo nos sentimos durante el día. La coordinadora nos felicitó y animó a no olvidar la enseñanza principal: todo depende de la historia que nos contamos y la energía que le pongamos a la vida y al trabajo. Finalmente, se entregó un reconocimiento al director de la empresa, terminando así un viaje lleno de risas y aprendizajes.
